La Semana Santa en Potosí es una de las manifestaciones culturales más tradicionales e icónicas del pueblo potosino. Su fe y religiosidad, arraigada desde la época virreinal, engloba ritos y costumbres en un sincretismo religioso entremezclada entre la cultura de los andes y la antigua europea. Esta conmoración religiosa de la pasión y muerte de Jesús, se ha visto enriquecida por la fe y devoción de los pueblos hispanoamericanos. Y en Bolivia, Potosí sin duda, guarda y practica este tesoro cultural más que ninguna otra.
Por ello, Semana Santa se constituye en una de las conmoraciones y celebraciones más grandes de la tradición potosina y si bien ha decaído en esplendor, de lo que fue en tiempos pasados, la devoción y fe siempre ha estado constantemente fortalecida. Se echa de menos por otra parte, la gran opulencia que mostraban los pobladores en algunas costumbres que ya no se practican, como el de los “pasos” que era escenas armadas y que eran llevadas en procesión con representaciones de varios pasajes bíblicos relacionados a Semana Santa y así muchas otras, que se espera vuelvan a practicarse y revalorizarse.
Estas imágenes y esculturas corresponden en su mayoría a los siglos XVI, XVII y XVII. Muchas no tienen firma identificable y en gran medida son de autores anónimos, probablemente indígenas o mestizos, que aún sin saber escribir o leer, en la mayoría de los casos, supieron crear obras de gran maestría artística que hoy constituyen parte importante del patrimonio cultural del mundo.
Sirva esta pequeña muestra de lo más tradicional que se puede apreciar en Semana Santa en Potosí.
El Cristo Crucificado
La imagen y representación de Jesús en la cruz, es sin duda una de las más veneradas en Potosí y el mundo. Y los templos antiquísimos de esta villa, cuentan con verdaderas reliquias religiosas con esta representación. Entre estas, el Santo Cristo de la Vera Cruz es tal vez la imagen más icónica de la religiosidad potosina. Además de ser la más antigua de la que se tenga registro, pues apareció como un milagro en las puertas del templo de San Antonio de Padua, (San Francisco) en el año de 1550, a solo cinco años de establecido el asiento de Potosí.
En Semana Santa, era llevada en procesión, (tanto como en otras fechas) con gran devoción, por los muchos milagros que se le atribuyen y de los que da cuenta Bartolomé Arzans de Orsua y Vela y otros cronistas importantes de la época virreinal en Potosí. Se desconoce al autor de tan magnifica escultura, obra de gran arte y gran esplendor, que puede situársele entre las obras más emblemáticas del renacimiento y el emérgete barroco, que luego tendría importante incidencia en los andes. Emergiendo y resultando en el gran renacimiento y barroco mestizo y en el que Potosí, fue el área donde más brilló con su denominada escuela potosina, en la que deslumbraban por su arte, los más grandes maestros de América.
Otra imagen ya icónica en Potosí es el Cristo que se guarda en el templo y parroquia de San Roque del mismo barrio. Es una imagen que goza de gran devoción, a la que los devotos llevan en procesión desde el miércoles de ceniza, hasta los días de Semana Santa. Es tradicional que la imagen de Cristo haga visitas a cuarenta lugares, casas, instituciones y otras antes de Semana Santa, simbolizando los cuarenta días en que Jesús estuvo en el desierto, antes de su crucifixión. La imagen es del periodo virreinal y es atribuida al escultor Luís de Peralta. Es sin duda, una de las más grandes reliquias del pueblo potosino.
El señor de las caídas
El Nazareno portando la cruz, para el pueblo cristiano, es el símbolo del sufrimiento y sacrificio que Jesús hace por los hombres. Y el pueblo potosino es gran devoto de esta representación y una de las más populares es el que se encuentra en el templo de San Benito. La misma sale tradicionalmente en procesión el primero de enero de año nuevo. En Semana Santa como es tradicional, el pueblo visita el templo de San Benito, donde si bien la imagen no sale en procesión, ahí está presente para sus fieles devotos, quienes le rezan y le colocan velas por la gran devoción de la que es merecedor.
Otra imagen del Cristo de las caídas, que goza de gran popularidad por el pueblo, es la que sale en procesión del templo de San Juan Bautista. Antes de la Semana Santa; recorre el barrio del mismo nombre y otros aledaños, donde le esperan con altares que en número, simboliza los hechos ocurridos en la pasión y muerte de Jesús y en su recorrido a la crucifixión y posterior a esta.
Otra imagen del cristo de las caídas de gran arraigo religioso y tradicional es el que se encuentra en el templo del Calvario. Es tan popularísima y querida la imagen de este Nazareno portando la cruz, que alrededor de esta se realizan toda una serie de tradicionales ritos y costumbres, con pasantes, arcos de platería y otras, antes y después de Semana Santa.
El Cristo yaciente o el señor del Santo Sepulcro
Los templos religiosos de la ciudad de Potosí guardan esta imagen con gran devoción y las mismas son obras de consagrados autores del pasado virreinal de Potosí. Uno de estos templos es el de San Martín de Tours, que guarda una imagen del Cristo yaciente, que goza de gran popularidad entre sus devotos. La imagen es magnífica y de gran maestría. Esta imagen en el pasado glorioso de Potosí, era de articulaciones movibles y en Semana Santa era crucificado y llevado en procesión. Seguidamente la imagen era descendida de la misma cruz y era acomodada en la posición del cristo yaciente de manera horizontal en su santo sepulcro, entonces ya como el Señor del Santo Sepulcro recorría las calles en procesión del Viernes Santo en el Potosí virreinal de entonces. En la actualidad está imagen ha sufrido modificaciones que la han vuelto estática, con otras intervenciones poco profesionales que necesitan inmediatamente ser restauradas y devueltas a su original estado.
La Virgen Dolorosa
Es otra icónica imagen de Semana Santa en la Villa de Potosí. Tradicionalmente es la imagen de la madre de Jesús, María, quien acompaña a su hijo en su tormento hacia su calvario, que lo es de ella también, la imagen representa todo el dolor y sufrimiento de una madre hacia su hijo, por ello es muy venerada por las mujeres potosinas, que ven en ella a la abnegada madre potosina, a veces sufrida, que da todo por sus hijos. Existen varias imágenes de la Virgen Dolorosa en los templos de Potosí, hechos con gran maestría.
Todas estas forman las imágenes religiosas más representativas de Semana Santa en la Villa Imperial de Potosí. Siendo la más grande muestra de la religiosidad potosina, pero que es un pálido reflejo de la pompa y opulencia de esta celebración en los tiempos antiguos de Potosí.
*Artista, escritor e investigador historiográfico.
No comments:
Post a Comment